Trasaltar de la Catedral de Burgos
Desde Guías Turísticos. Descubrir Burgos te proponemos conocer con guía los relieves del trasaltar de la Catedral de Burgos. Para más información sobre visitas guiadas a la Catedral de Burgos pincha aquí o contacta en el teléfono +34 649 785 940
Sin duda, entre las innumerables joyas que la Catedral de Burgos atesora, ocupan un papel destacado los cinco relieves que decoran el trasaltar. Los relieves del trasaltar de la Catedral de Burgos conforman un verdadero conjunto de retablos pétreos o medallones.
Sobresalen los tres centrales, obra del escultor borgoñón Felipe Vigarny. Realizados a finales del siglo XV, están considerados uno de los conjuntos escultóricos más sobresalientes del tránsito del gótico al renacimiento hispano. La obra se completó casi dos siglos después con dos nuevos relieves en lo extremos. Fueron ejecutados por el escultor Pedro Alonso de los Ríos.
Además, la reciente restauración a la que se han sometido ha frenado su preocupante deterioro. Podemos disfrutarlos, de nuevo, casi en su estado original.
RELIEVES DEL TRASALTAR. CATEDRAL DE BURGOS
FELIPE VIGARNY
Philipus Biguerny nació en la localidad de Langres (Borgoña) hacia los años 1470-1475. Habría viajado en su juventud a Italia, lo que explicaría su conocimiento del Renacimiento. Según cuenta la tradición, Felipe Vigarny pasó por la ciudad de Burgos en peregrinación a Santiago de Compostela. A su llegada a Burgos era ya un artista formado. En su estilo coexistían rasgos flamencos y borgoñones con influencias del Renacimiento italiano.
Contaría con unos veinticinco años de edad cuando pudo entrar a trabajar en el taller de Gil de Siloé, necesitado de ayudantes por sus numerosos encargos en la Catedral de Burgos y en la Cartuja de Miraflores. Allí conocería a Simón de Colonia, maestro mayor de la catedral. A Simón de Colonia había encargado el Cabildo el embellecimiento de los arcos del "trascoro de la yglesia". En aquellas fechas el coro del templo no estaba en su emplazamiento actual, sino a ambos lados del altar mayor. Ante la inquietud del Cabildo por el retraso, Simón de Colonia les presenta a un nuevo escultor: el "maestre Felipe".
Los tres retablos pétreos están tallados sobre nueve bloques de caliza de las canteras de Briviesca. Están flanqueados por columnas adornadas con estatuaria. Reposan sobre un zócalo decorado con cuatro estatuas sedentes bajo doseletes. Remata el conjunto una crestería de arcos conopiales que alberga estatuillas de apóstoles y santos. Este enmarcamiento se lo debemos a Simón de Colonia y su taller.
El 17 de julio de 1498, se firma el contrato para que Felipe Vigarny esculpiera el primero de los tres relieves que finalmente acabaría elaborando: Camino del Calvario.
Camino del Calvario
El primer relieve encargado a Vigarny representa a Jesús con la Cruz a Cuestas Camino del Calvario. Aunque mantiene una composición y unos fondos de gustos góticos, el escultor incorpora ya elementos con aires renacentistas. Por primera vez en Burgos, encontramos decoración plateresca, como candelieris y amorcillos, en las jambas y el dintel de la puerta de Jerusalén. Sobre los capiteles corintios de esa misma puerta, representaciones clásicas de Hércules en su equiparación a la figura de Cristo. Vigarny se permite la liccencia artística de situar el escudo de la catedral de Burgos en el dintel de la puerta.
En el zócalo encontramos las figuras sedentes de los apóstoles Santiago el Mayor, San Pedro, San Andrés y Santiago el Menor.
El 16 de marzo de 1499, Felipe Vigarny entrega el trabajo finalizado. Prueba de la satisfacción del trabajo realizado, se añaden al pago acordado de doscientos ducados otros treinta más.
El Camino del Calvario era tan solo uno de los relieves del trasaltar que se había ideado para convertirlo en un Vía Crucis con las principales escenas de la Pasión. Dos días después de abonarle el primer trabajo, el Cabildo contrata con Vigarny otros dos paneles: la Crucifixión y el Descendimiento y Resurrección.
Este nuevo encargo obligó a Vigarny a establecer su residencia definitiva en Burgos. Su primera vivienda burgalesa estuvo en una casa del barrio de San Juan. Poco después, en ese mismo barrio, en viviendas junto a la Casa de la Moneda. En Burgos se casó dos veces. La primera con Mari Sáez Pardo, con la que tuvo cinco hijos. A la muerte de esta (1535) se vuelve a casar con Francisca Velasco, familia del Condestable, con la que tiene otros cinco hijos. Solo uno de sus hijos, Gregorio Pardo, sigue el camino artístico del padre.
Crucifixión
El relieve de la Crucifixión ocupa el centro del trasaltar. Preside el mismo Cristo crucificado en actitud muy natural, sin manifestar signos de dolor. Contrasta con las expresiones crispadas de los dos ladrones. A los pies de la cruz, se acumulan los personajes. La Virgen María es consolada en la parte izquierda. María Magdalena aparece arrodillada y abrazada a la cruz. Todos ellos, rodeados por soldados, sayones y otras figuras que miran con indiferencia.
Sin duda, destacan los rostros de gran belleza y de talla delicada. Son más de veinte los personajes de la escena de diferentes edades y clases sociales. Tanto en este relieve como en el anterior, Vigarny manifiesta un especial interés por los caballos. Es este un tema presente tanto en relieves italianos como en pintura flamenca del siglo XV. También como en el relieve del Camino del Calvario la influencia flamenca dicta la manera en la que la composición llena el panel en la zona superior. Allí vemos un fondo rocoso con edificaciones, murallas y escenas con personajes a pequeña escala.
De nuevo, cuatros estatuas sedentes decoran el zócalo. Son, esa vez, San Simón, San Juan, San Matías y San Pablo.
Este retablo y el siguiente, más las dos predelas con sus ocho imágenes, se concertaron el 18 de marzo de 1499 en 600 ducados.
Descendimiento y Resurrección
Aunque según el contrato del relieve debería contener un Descendimiento, Vigarny divide el espacio en dos y dedica la mitad al tema de la Resurrección. Lamentablemente ha llegado a nuestros días muy deteriorado. Prácticamente toda la mitad inferior está perdida.
En primer plano, a la izquierda, la Virgen sujetaba sobre sus rodillas el cuerpo de Jesús ahora desaparecido. De nuevo, multitud de personajes superpuestos rodean la cruz. Entre ellos, San José de Arimatea, con los clavos de la Crucifixión en su mano, y Nicodemo. En la parte derecha, Cristo resucitado emerge sobre los soldados romanos, también desaparecidos casi en su totalidad.
Otra vez vemos como Vigarny completa el relieve con soberbias arquitecturas y pequeñas escenas de fondo.
Las cuatro imágenes sedentes del banco son, esta vez, San Bernabé, San Judas Tadeo, San Felipe y San Bartolomé.
Desconocemos la razón por la que quedaron sin hacer, en el siglo XVI, los relieves laterales del trasaltar. Hubo que esperar más de cien años para que a los tres relieves del centro del trasaltar, se añadieron otros dos, uno en cada extremo, en el siglo XVII. El arzobispo de Burgos Enrique Peralta y Cárdenas se los encarga al escultor vallisoletano Pedro Alonso de los Ríos.
PEDRO ALONSO DE LOS RÍOS
Nacido en Valladolid en 1641, Pedro Alonso de los Ríos desarrolló gran parte de su carrera artística en Madrid. Allí se trasladó hacia el año 1660. En Madrid mantuvo un activo taller hasta su muerte en 1702. Aunque fue un artista bastante prolífico, gran parte de su producción han desaparecido. Afortunadamente no ha ocurrido lo mismo con los dos relieves que ejecutó para el trasaltar de la Catedral de Burgos.
En 1679, el arzobispo de Burgos, Enrique de Peralta, dona 32000 ducados a la catedral para terminar las obras del trasaltar con otros dos relieves relativos a la Pasión de Jesús. El contrato se firmó entre el arquitecto Fernando de la Peña y Pedro Alonso de los Ríos. Se detalla en el contrato que debe realizar en piedra caliza de Hontoria de la Cantera dos relieves con la Oración en el Huerto y la Ascensión de Cristo.
Pedro Alonso de los Ríos terminó los dos relieves en 1683. El 13 de enero de ese año se informa al Cabildo que el escultor había finalizado la obra y deseaba regresar a Madrid.
Oración en el Huerto
La Oración en el Huerto es el relieve menos afortunado de los dos. Representa a Jesús arrodillado en el monte de los Olivos, con San Pedro, San Juan y Santiago dormidos en la parte inferior. Un ángel presenta un cáliz a Jesús y varios personajes se acercan con judas al frente.
Las estatuas de la predela representan a los Padres de la Iglesia: San Gregorio, San Jerónimo, San Agustín y San Ambrosio. Está rematadas por doseletes de tradición gótica. Busca Alonso de los Ríos mantener la unidad con los relieves de Vigarny.
Ascensión
El quinto relieve del trasaltar representa la Ascensión de Jesús a los cielos. Preside la escena, Cristo entre nubes y ángeles. En la parte baja, la Virgen arrodillada y los Apóstoles absortos ante el milagro. La composición de la escena y la talla son de mayor calidad que las del relieve anterior.
Su zócalo correspondiente acoge imágenes de los cuatro evangelistas.
Aunque los relieves da Alonso de los Ríos tienen cierta entidad, no resisten la comparación con los de Felipe Vigarny.
RESTAURACIÓN DE LOS RELIEVES DEL TRASALTAR
Durante más de dos años, se ha sometido a una profunda restauración al conjunto escultórico del trasaltar. Con estos trabajos, terminados en octubre de 2020, se intentan frenar los factores de alteración, devolver la estabilidad al conjunto y recuperar la unidad de la obra.
Sobre todo, la Crucifixión y el Descendimiento y Resurrección estaban bastante deteriorados por la humedad y la cristalización de sales minerales. La mayor porosidad de la caliza de Briviesca empleada por Vigarny, frente a la de Hontoria utilizada en los relieves de Alonso de los Ríos, es la principal razón de su peor conservación.
Ya en el siglo XVI se advirtió el alarmante deterioro de los relieves y se colocó un muro entre el presbiterio y el relieve del Camino al Calvario para evitar la acción directa de la humedad. Esa intervención explica que sea el relieve mejor conservado de los tres de Vigarny.
Los trabajos de restauración han consistido en la desalinización y limpieza de la piedra. Asimismo se han eliminado morteros añadidos en desafortunadas intervenciones anteriores. Por último, se ha impermeabilizado la zona añadiendo una cámara de ventilación.
Visitas guiadas a la Catedral de Burgos
Como siempre, terminamos recomendándote visitar los relieves del trasaltar de la Catedral de Burgos. Si quieres ver los relieves y la Catedral de Burgos con guía contacta aquí con Guías Turísticos Burgos, Guías Oficiales de Turismo. Visitas guiadas a la Catedral de Burgos.
